MIentras se desarrollaba un partido de un campeonato de fútbol en el barrio La Matera de Quilmes Oeste se produjo una batalla campal entre los jugadores y los simpatizantes de los equipos que disputaban el encuentro

En la pelea hubo corridas, golpes, sillas que fueron arrojadas, piedras y hasta armas blancas; y finalizó con una persona con el tabique roto y varios heridos, entre ellos menores alcanzados por piedrazos.

Según testigos todo empezó cuando uno de los conjuntos comenzó a gritar y provocar al rival, lo que generó la reacción inmediata de profesores, jugadores y allegados.

En pocos segundos, la discusión verbal derivó en una trifulca generalizada dentro del predio donde comenzaron los primeros puñetazos y empujones; hasta que en medio del caos, algunos exhibieron palos y otros utilizaron armas blancas a manera de amenazas