Este miércoles al mediodía, un grupo trabajadores de las aplicaciones por  delivery  -PedidosYa, Rappi y Uber- costaron la tradicional esquina de Yrigoyen y Rivadavia de Quilmes  para exigir mayores medidas de seguridad, al tiempo que denunciaron ser  víctimas constantes de robos y agresiones mientras desarrollan su labor.

La protesta comenzó en la esquina de 12 de Octubre y Urquiza, y desde allí  avanzaron en caravana con sus motos hacia el centro quilmeño para  detenerse en Yrigoyen y Rivadavia, y luego partir continuaron hasta las puertas del Municipio.

Los trabajadores denunciaron que los robos se repiten a diario y apuntaron contra la falta de controles. Indicaron que  “los motochorros son siempre los mismos” y cuestionó que nadie los detenga. “Dos o tres con cascos, sin identificación, circulan libremente, y a nosotros que estamos identificados nos paran a cada rato”, expresó en medio del reclamo.

Señalaron que son víctimas de robo todos los días y que en muchos casos, los robos terminan en agresiones, golpes y disparos; sobre todo  en horarios nocturnos y en zonas periféricas del distrito.

El reclamo de los delivery es mayor presencia policial y la implementación de políticas de prevención que garanticen condiciones mínimas de seguridad para desempeñar su tarea. La protesta se desarrolló de manera pacífica y con el objetivo de visibilizar una problemática que, según remarcaron, pone en riesgo no solo su fuente de trabajo, sino también su integridad física.